• Se presenta ante más de dos mil mexiquenses en Toluca y Texcoco. Interpreta el clásico vals “El Cascanueces” de Tchaikovsky.
• Concluye su temporada 151 de conciertos presentados en los principales escenarios del EdoMéx y su exitoso regreso a la Sala Nezahualcóyotl en la CDMX.
Con dos emotivas presentaciones, la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM) concluyó su Temporada 151, con el esperado “Concierto de Navidad”, bajo la dirección del maestro Rodrigo Macías.
Ante dos escenarios ocupados en su totalidad, el viernes 13 en la Sala “Felipe Villanueva”, en Toluca y el sábado 14 en la Sala de Conciertos “Elisa Carrillo”, del Centro Cultural Mexiquense Bicentenario en Texcoco; los más de dos mil asistentes disfrutaron de una velada musical que quedará grabada en sus corazones.
Estos tradicionales conciertos decembrinos marcaron el final de una temporada extraordinaria, con 15 programas presentados en los principales escenarios del Estado de México, además representó el exitoso regreso a la Sala Nezahualcóyotl, en la Ciudad de México.
El programa elegido para esta ocasión fue una joya musical que, como un abrazo sonoro, unió el virtuosismo de los grandes maestros con la calidez de la Navidad.
La velada comenzó con una pieza que evocó la elegancia y el espíritu festivo del Viejo Continente: el famoso “Danubio Azul” de Johann Strauss. Este vals, llenó de frescura y brillantez, abrió el concierto con su característico flujo melódico que, como un río, transportó al público hacia un mundo de gracia y romanticismo.
A continuación, la Orquesta presentó el Concierto para dos violines, cuerdas y bajo continuo en re menor, BWV. 1043, de Johann Sebastian Bach, una obra maestra del Barroco que iluminó la sala con su complejidad y belleza.
Las violinistas, Nana Babayeva, asistente de concertino de la OSEM, y Liliya Nikolayevna, quien fue parte de la agrupación durante más de 20 años, ofrecieron una interpretación que dejó al público sin aliento, mostrando la sincronización perfecta y el virtuosismo de ambos instrumentos.
En seguida, las emociones se intensificaron con la interpretación de “Navarra”, de Pablo de Sarasate, una obra vibrante y dinámica, ejecutada con una destreza impresionante que dejó una huella de admiración entre los asistentes.
El momento más esperado llegó con la Suite de “El Cascanueces” de Piotr Ilich Tchaikovsky, una pieza profundamente arraigada en la tradición navideña. Su presencia en el concierto de cierre no sólo brindó un sentido de nostalgia y alegría, sino que destacó la relevancia de Tchaikovsky en la música clásica, siendo esta obra una de las más queridas por el público de todas las edades.
El público mexiquense respondió con cálidos aplausos, demostrando el enorme cariño que tienen por la OSEM, que una vez más cumplió su misión de acercar la música de alta calidad a todos los rincones del Estado de México ya que la Cultura es un derecho del ser humano.
La OSEM agradece a todos aquellos que han sido parte de este viaje sonoro durante la temporada. La magia de la música sigue viva; el próximo año la Orquesta continuará visitando cada rincón del Estado de México, con la promesa de seguir creando momentos inolvidables.
La Orquesta invita a seguirla en sus redes sociales oficiales para conocer más acerca de los programas, así como el inicio de la Temporada 152, en 2025, búscala en Facebook, X e Instagram como @OSEMoficial.