En un esfuerzo por combatir el rezago educativo y garantizar el derecho a la educación, el gobierno municipal de Nezahualcóyotl se unió formalmente a la campaña nacional “El Poder de Alfabetizar”, impulsada por el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), con una meta clara: incorporar a casi 3 mil personas al programa de alfabetización.

Durante el acto protocolario, el presidente municipal, Adolfo Cerqueda Rebollo, encabezó la instalación del Comité Municipal de la campaña y firmó un convenio de colaboración con el titular del INEA, Juan Carlos Santiago Pimentel. La firma representa un paso clave para fortalecer la atención educativa a jóvenes y adultos en situación de rezago dentro del municipio.
Cerqueda Rebollo destacó que la Dirección de Participación Ciudadana trabajará de la mano con IMSS Bienestar y la Policía Municipal, para identificar espacios comunitarios donde se puedan acercar los servicios educativos a quienes más lo necesitan. “Tenemos más de 11 mil puntos de reunión ciudadana. En cualquiera de ellos puede estar la oportunidad para que una persona retome su educación básica”, afirmó el edil.

El comisario Vicente Ramírez, representante de la Policía Municipal, subrayó que la corporación apoyará activamente en la localización de estos espacios y en la difusión de la campaña, utilizando su contacto cotidiano con la ciudadanía como una herramienta para promover el acceso a la educación.
Por su parte, el titular del INEA reconoció que la colaboración con el gobierno de Nezahualcóyotl representa una oportunidad única para ampliar la cobertura de la Estrategia Nacional de Alfabetización, la cual será prioritaria en los tres niveles de gobierno.
Entre los recursos ya disponibles para el programa se encuentra el material educativo “Nombrando y contando al mundo”, diseñado especialmente para facilitar el aprendizaje de la lectura y escritura en personas adultas.
Con estas acciones, el municipio reafirma su compromiso con la inclusión, la equidad y la justicia social, convencido de que saber leer y escribir no sólo es un derecho, sino una herramienta poderosa para transformar vidas.